La belleza natural, la que te sugiere resaltar lo que más te gusta de ti, sin acudir a estándares alejados de tu propia realidad, ¡está de moda!
Sentirnos y vernos bien de pies a cabeza, es cada vez más sencillo. Si quieres unirte a esta tendencia, basta con empezar a conocerte mejor para que puedas crear rituales de autocuidado y amor propio que aporten a tu salud física y a tu bienestar emocional.
Volver a lo natural es casi que una exigencia para todos; reconectar con nuestro cuerpo y con la naturaleza a través de caminatas bajo el sol, prácticas de yoga o meditación; la búsqueda de alimentos que nacen de la tierra, aprender a hablar de nuestras emociones, son prácticas que, en conjunto, nos ayudan a disminuir el agite mental en el que muchas veces nos sumergimos.
Pero no se trata de empezar a cumplir un paso a paso de rutinas que nos roben la paz, lo realmente importante es conocernos cada vez mejor y saber cuáles son las opciones que nos hacen felices, aquellas que, en realidad, aportan a nuestro BIEN-Estar.
En la búsqueda del bienestar, el cuidado de la piel toma, cada vez, un papel más importante, pues actúa como una esponja que absorbe todo lo que en ella aplicamos y lo transmite, en pocos segundos, al torrente sanguíneo, afectando la salud del organismo y nuestro estado de ánimo… Cuidar de ella es esencial pues la belleza no solamente es como nos vemos sino también como nos sentimos.
Elegir, con conciencia, los productos que aplicamos sobre la piel, es nuestra mayor responsabilidad. Sobre todo cuando muchas investigaciones han comprobado que los productos de la industria cosmética, no solo afectan el medio ambiente, también tienen incidencia en nuestra salud!
Atrévete a salirte de lo establecido. Si aún no lo has hecho, anímate a elegir productos con ingredientes naturales que nutran, regeneren y sanen tu piel. Estos productos, libres de químicos, te ayudarán a sentir la piel más linda, fresca y con un “glow” que reflejará tu belleza natural.
Además de los beneficios para la piel, estos productos contienen el aroma y el poder sanador de las plantas que se transfieren directamente a esa parte del cerebro en la que se alojan tus emociones, mejorando de inmediato tu estado de ánimo.
Cuidar de tu piel es muy fácil, regálate unos minutos en la mañana y en la noche para tu rutina de cuidado facial: Retira el maquillaje o impurezas con jabón de rostro, seca suavemente e hidrata con tónico facial; con el rostro aún húmedo, aplica el tónico facial y termina con tu crema favorita. Recuerda incluir accesorios como la gua sha de jade dos veces por semana. En el día, recuerda siempre el protector solar; con estos sencillos pasos, reflejarás siempre la belleza natural de tu piel.
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